Aamod Korhonen
El fotógrafo de la esperanza
Aamod Korhonen (Vadstena, Suecia, 1974) es el fotógrafo de la esperanza. Su trabajo más personal, The Hope Project, reúne retratos de hombres de distintos países de Europa que han luchado con sus problemas de salud mental. La exposición es un inspirador relato de superación, que incluye historias como la del propio fotógrafo sueco (“tan solo era un adolescente cuando intenté suicidarme por primera vez”). Hoy Aamod encuentra la paz interior en el Port d’es Canonge, el pequeño puerto marinero de Esporles en el que vive desde hace dos años.
texto Angie Ramón
fotografía Aamod Korhonen


“Tenía 15 años y una vida feliz, pero me sentía diferente al resto de mis amigos, como si no perteneciera a ningún lugar”, empieza contando Aamod Korhonen. “Sentía que no podía compartir con nadie mis sentimientos más profundos. Hasta que un día el alcohol se convirtió en mi aliado. Empecé a beber desde muy joven. Cuando estaba borracho, me sentía en paz. Tan solo era un adolescente cuando intenté suicidarme por primera vez”, relata.
A los 20 años le diagnosticaron una depresión severa y desde aquel día no ha vuelto a probar una gota de alcohol. Si bien durante estos treinta años posteriores al diagnóstico no han faltado los ataques de pánico, el aislamiento social y el sufrimiento general inherente a la propia vida.
Pero Aamod ha querido ir hacia la luz en medio de tanta oscuridad, practicando Aikido, aprendiendo a controlar su respiración y asistiendo a más de mil reuniones de Narcóticos Anónimos. “Nunca he necesitado ocultar nada y no me avergüenzo de mi salud mental”, afirma.
Aamod es una persona con una mirada que te llega al alma. Se define como fotógrafo artístico, si bien es ante todo un aprendiz y un férreo defensor de comunicar los sentimientos, capaz de leer las expresiones faciales, identificar el dolor y saber acompañarlo. “Cada vez que conozco a gente con problemas de salud mental y exponemos nuestras vivencias, aparece una conexión a un nivel muy profundo”, asegura. Como el día en que conoció a un amigo de su hijo, de 15 años, que intentó suicidarse. “Hablé con él, él se abrió conmigo y poco más tarde me confesó que esa conversación le había salvado la vida”. [...]
--------
Lee este reportaje completo en la revista IN PALMA 81. Y si lo deseas, suscríbete a la revista IN PALMA durante 1 año y recibe en tu casa las próximas 4 ediciones de la revista.

